Esta presentación en la Isla de Wight es impresionante y demuestra a un Hendrix y su banda tocando de una manera libre, sucia, cruda y pesada, a pesar de que a él jamas le gustó ese concierto tocado a mitad de la madrugada en la fría isla de Inglaterra.
Cada canción es excepcionalmente maravillosa, desde que inicia con la tradicional inglesa "God Save The Queen", entra el poder en sus amplificadores marshall conectados en linea. Poco después se enfrenta con problemas técnicos en su guitarra con las interferencias de ondas magnéticas de ciertos dispositivos cosa que le da un pésimo cierre en "Spanish Castle Magic", pero aquí estuvo la esencia, con un Hendrix hasta el tope de LSD, con wah wah, demasiada distorsión a alto volumen y un Mitchell a la batería y Billy Cox al poderoso bajeo.
"Machine Gun", un blues jam de 22 minutos de duración dedicada a los "skinheads" o mejor dicho soldados que lucharon inútilmente en Vietnam es uno de los mejores blues que pudo crear Hendrix. A mitad de canción Hendrix se ve obligado a reclamar la interferencia de radiocomunicadores en sus amplificadores, pero malditasea!, que hermoso se escuchan esas interferencias combinados con el excelente poder del blues de "Machine Gun". El impresionante solo de batería de Mitch es estupendo, doble bombo, doble tom de piso, ride... una delicia para nuestras primitivas mentes y casi para terminar una hermosa improvisación, seguramente miles quedaron boquiabiertos. Como quisiera haber estado ahí...El bajeo de Billy es demasiado preciso que se atreve a jugar con los solos de Hendrix para después emparejarse y no perder el machacante tambor de Mitchell. Jamás "Red House" fue interpretado de una manera tan sombría y atronante a comparación del festival de Woodstock donde se ve a un Hendrix lleno de alegría, aquí cada vez que algo le salía mal maldecía dentro de el moviendo la cabeza, pero aun así sigue tocando... así es el blues! así que prepárate un intenso jam pulcro de wah wah.
Aquí se concentra el punto alto en la carrera de Hendrix antes de morir. Blues extremadamente tranquilos, versiones crudas de clásicos como Foxy Lady, jams interminables con abuso de wah wah, distorsión al máximo, canciones inéditas, baladas "heavy" como "Hey Baby" tocadas con el corazón que te harán sentir escalofríos recorriendo tu grasoso cuerpo.
Son dos horas exactas de reproducción así que sube el maldito volumen y disfruta a Hendrix, Mitchell y Billy aplastando tus orejas enfrente de tí, mientras degustas un buen whisky y un cigarrillo en uno de sus ultimos conciertos y el mas crudo de toda su carrera,,, HENDRIX IS GOD!!.
"Machine Gun", un blues jam de 22 minutos de duración dedicada a los "skinheads" o mejor dicho soldados que lucharon inútilmente en Vietnam es uno de los mejores blues que pudo crear Hendrix. A mitad de canción Hendrix se ve obligado a reclamar la interferencia de radiocomunicadores en sus amplificadores, pero malditasea!, que hermoso se escuchan esas interferencias combinados con el excelente poder del blues de "Machine Gun". El impresionante solo de batería de Mitch es estupendo, doble bombo, doble tom de piso, ride... una delicia para nuestras primitivas mentes y casi para terminar una hermosa improvisación, seguramente miles quedaron boquiabiertos. Como quisiera haber estado ahí...El bajeo de Billy es demasiado preciso que se atreve a jugar con los solos de Hendrix para después emparejarse y no perder el machacante tambor de Mitchell. Jamás "Red House" fue interpretado de una manera tan sombría y atronante a comparación del festival de Woodstock donde se ve a un Hendrix lleno de alegría, aquí cada vez que algo le salía mal maldecía dentro de el moviendo la cabeza, pero aun así sigue tocando... así es el blues! así que prepárate un intenso jam pulcro de wah wah.
Aquí se concentra el punto alto en la carrera de Hendrix antes de morir. Blues extremadamente tranquilos, versiones crudas de clásicos como Foxy Lady, jams interminables con abuso de wah wah, distorsión al máximo, canciones inéditas, baladas "heavy" como "Hey Baby" tocadas con el corazón que te harán sentir escalofríos recorriendo tu grasoso cuerpo.
Son dos horas exactas de reproducción así que sube el maldito volumen y disfruta a Hendrix, Mitchell y Billy aplastando tus orejas enfrente de tí, mientras degustas un buen whisky y un cigarrillo en uno de sus ultimos conciertos y el mas crudo de toda su carrera,,, HENDRIX IS GOD!!.